viernes, diciembre 26, 2014

Buenos deseos y Año Nuevo

A propósito del Año Nuevo y la costumbre de expresar buenos deseos, les propongo una lectura muy bonita en el vínculo siguiente si tienen ganas de leer un poco.

http://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/la-expresin-de-buenos-deseos-hacia-nuestro-prjimo-un-acto-de-habla-corts-automtico-0/html/01b66c0c-82b2-11df-acc7-002185ce6064_4.html


domingo, diciembre 21, 2014

Voluntad y perseverancia para cambiar



 Preguntas y respuestas para nota publicada en la revista dominical en el Diario el Deber 
(Año Nuevo ¿Significa vida nueva? 21-12-2014)


1.- ¿Es o no importante empezar el ‘Año Nuevo con vida nueva’, como se dice popularmente por estas fechas?...¿En qué casos sí es necesario?

Lo que se puede renovar en el año nuevo como una fecha simbólica, son los propósitos y las metas futuras para mejorar la única vida que cada uno posee.  El poder concretar logros suele requerir más de un año, por tanto proponerse nuevos alcances a partir de una determinada fecha puede servir para reforzar la voluntad y para no abandonar antes de tiempo lo proyectado. Siempre será necesario comprometerse con uno mismo para acrecentar nuestro desarrollo personal, todos los momentos son buenos para ello, a veces eso implica terminar etapas y otras inaugurarlas; en cualquiera de los casos se requiere el ejercicio de la fuerza de voluntad y de la inteligencia para tomar buenas decisiones.

2.- ¿Cómo hacer realidad los cambios anhelados en el nuevo año que se viene y que no queden solo en buenos deseos?

Para garantizar que los cambios deseados se hagan efectivos, hay que partir de la premisa de que todo plan debe obedecer a una programación fruto de la reflexión, así como a una proyección realista de lo que queremos alcanzar. Se pueden desear innumerables cosas, pero se debe priorizar y elegir en consecuencia, ya que cualquier deseo debe gestionarse, ningún logro es instantáneo ni viene envuelto en papel de regalo, siempre hay que actuar y trabajar para obtenerlo; si tenemos eso claro seguramente cosecharemos satisfacciones en la medida que vayamos cumpliendo etapas. Es aconsejable dividir un gran objetivo en varios objetivos secuenciados, de esa forma se irá controlando el avance y se obtendrán gratificaciones en el camino o en su defecto se irá corrigiendo el rumbo.

3.- ¿Porqué terminamos evitando o postergando grandes cambios que son necesarios en nuestra vida?...Y, ¿qué riesgos puede desencadenar ello? 

Casi siempre los grandes cambios se postergan ya que son de gran complejidad, pero a veces se  imponen porque la situación es inevitable o grave (una revolución, un accidente, una enfermedad, una muerte, etc.). La medida para no postergar cambios necesarios; es ser prudente y estar consciente de que un gran cambio es un proceso que no se hace de un día para otro, tiene etapas y un tiempo para cada cosa. El análisis, la reflexión y la planeación, serán nuestros aliados al momento de movilizarnos para cambiar. Los cambios impulsivos o al calor de la emoción por lo general se estrellan con la realidad que no puede ser forzada, cambiar implica también saber esperar e ir concretando paso a paso de forma constante.

lunes, noviembre 03, 2014

Penas y sentimientos negativos

Nota solicitada para el Diario el Deber 2013 
Aquí se publican las respuestas completas




La importancia de desahogar nuestras penas y exteriorizar sentimientos negativos ¿Cómo desahogarnos de los sentimientos de impotencia, decepción, tristeza, dolor, fracaso, duelo, pérdida u otra experiencia negativa para salir adelante?. Hay quienes aconsejan llorar, hablar con alguien, reflexionar, meditar, escribir, cantar, bailar etc…¿Qué aconseja Ud.?

  •  La capacidad de ser consciente de los propios sentimientos y estados de ánimo se constituye en uno de los indicadores de la inteligencia emocional, la persona que reconoce y sabe interpretarlos,  tendrá mejores posibilidades para elaborarlos intelectualmente y someterlos a la mediación del pensamiento, lo cual es tarea necesaria y previa para poder identificar formas de lidiar con ellos de forma inteligente. De esa manera se evitaría quedar  sumergidos por largos periodos en estados angustiosos y de sufrimiento psíquico descontrolado.
  •  La exteriorización de sentimientos con otras personas puede ser de ayuda en la medida que el que escucha pueda aportar de alguna forma a la contención emocional y a dar consuelo y acompañamiento en caso necesario.
  • Cuando los estados emocionales son muy profundos y duran por tiempos  prolongados conviene buscar asesoría profesional, pues la tristeza, el dolor, la sensación de fracaso o inutilidad, el duelo intenso; pueden ser manifestación sintomática de procesos depresivos previos o por instalarse y que deben ser atendidos oportunamente, médica y psicológicamente.

Otras recomendaciones:

  •  Cuando la persona está inmersa en emociones que la hacen sufrir profundamente, generalmente no tiene ánimo ni motivación para ejercitar actividades recreativas o reflexivas, e incluso las cosas cotidianas pierden sentido. En esos casos en primera instancia el descanso, el dormir bien y tratar de alimentarse adecuadamente además de dedicar un tiempo al cuidado e higiene personal será suficiente para mantener un cierto equilibrio.
  • Rodearse de personas significativas afectivamente aportará sostén emocional y una dosis de tranquilidad y contención.
  •  Si la desazón no es muy intensa siempre será favorable dirigir la atención hacia actividades compensatorias que puedan generar estados de satisfacción aunque sea momentáneamente. Desenfocarse de los sentimientos negativos por unas horas aporta para ir restableciendo paulatinamente el equilibrio personal
  •   Se debe tener en cuenta que muchas veces los sentimientos negativos son resultado de situaciones o relaciones  toxicas que se han decidido abandonar; el sufrimiento en esos casos es solo antesala de nuevas oportunidades para mejorar la calidad de vida. Aceptar el cierre de etapas puede doler pero es necesario para evolucionar y avanzar.
  •  Ante la impotencia hay que ser consecuente y saber distinguir entre lo que se puede cambiar y mejorar cuando está en nuestras manos, entonces luchar y esforzarse. Luego hay que reconocer aquello que no depende de uno, hay que dejarlo ir para decidir en consecuencia. No se puede  obligar a nadie a cambiar.
  •  Para paliar la impotencia hay que reconocer también si se estaba preparado o no para un determinado desafío, a veces la impotencia surge de no haber sabido reconocer nuestras limitaciones y de no haber evaluado de forma realista la posibilidad de fracaso o de logro parcial.