Preguntas y respuestas solicitadas por la revista Extra del Diario El Deber
1.- ¿Qué actitud debe tomar la familia ante un miembro
alcohólico? ¿Cómo ayudarlo y no empeorar la situación? ¿Hay que intervenir o no
y en qué momento es más adecuado intervenir?
* Hay que tener en claro que al
alcoholismo es un síntoma que encubre otros problemas de tipo emocional, el
tratamiento no debe abordar solo el síntoma sino a la persona integral, la
adicción es la punta del iceberg. La adicción suele estar acompañada de otros
trastornos de personalidad. La familia directa debe facilitar y alentar a que
la persona afectada pueda encarar un tratamiento y posiblemente involucrarse en
el mismo.
*La intervención siempre es aconsejable y si
se hace prematuramente puede ayudar a que la adicción no se instale de forma
definitiva.
*Si la persona dependiente es
alguien joven que no ha cristalizado su personalidad adictiva es posible que
responda favorablemente y que acepte la intervención profesional para recibir
la asistencia más adecuada a nivel médico y psicológico.
*Difícilmente la persona adicta
puede encarar el proceso de cura de forma solitaria, necesita una red de
contención emocional, a veces la esposa y los hijos y otras los padres y
hermanos, además del soporte profesional
y los grupos de autoayuda.
*Si el afectado con la adicción
es un miembro adulto o adulto mayor seguramente ofrecerá más resistencia a
cualquier tipo de ayuda ya que sus hábitos están consolidados y muchas veces
estará incapacitado para afrontar el proceso de cura. La familia sola no suele
conseguir el resultado esperado en relación a la desaparición de la adicción.
2.- Y en el caso de que la persona afectada forme parte de
nuestro círculo de amistades, ¿cuál es la reacción y comportamiento adecuado
que debemos tener frente a esa persona con problemas de alcoholismo?
* En ocasiones algún amigo puede
ayudar a que el adicto encare el camino del
tratamiento, pero supone a la vez un acompañamiento de largo aliento así
como un grado de compromiso en un trayecto lleno de avances y retrocesos.
*En condiciones de sobriedad la
persona afectada suele mantener sus relaciones de amistad con cierta
normalidad, pero dependiendo del grado de afectación los amigos que no
comparten la adicción suelen alejarse ya que los intereses y el tipo de
diversión dejan de coincidir, por lo general el adicto al alcohol busca la
compañía de otras personas se inclinan por la misma dependencia, así pueden dar
rienda suelta a su compulsiva búsqueda de placer.
*Hay que tener en cuenta que el
consejo no solicitado generalmente no es bienvenido, por ello es muy delicado
intervenir como amigo.
3.- Por otro lado, ¿A qué riesgos o consecuencias se exponen
los familiares y/o allegados si no enfrentan adecuadamente el problema de
adicción de su familiar o amigo (Por ejemplo, ¿qué tan grave puede ser
convertirse en una persona codependiente?)
*Si la adicción de manifiesta
como un alcoholismo social donde el consumo es diario o semanal con cualquier
motivo social, generalmente no se presentan cuadros de embriaguez o descontrol,
en ese caso la convivencia puede ser bastante normal y no ofrece grandes
riesgos a los otros (salvo en la conducción bajo efectos del alcohol). Pero si
el consumo habitual termina con estados de embriaguez el grado de impulsividad
y puede poner en riesgo severo la integridad de cualquier persona del entorno. Hay
que tomar en cuenta que aunque el consumo no sea excesivo se produce un
deterioro progresivo de las facultades mentales y psicológicas, además de los
daños orgánicos que a la larga se
manifiestan.
* La codependencia puede oscilar
desde ser una enfermedad a nivel familiar que puede afectar a uno o más
miembros, o tratarse de un trastorno de personalidad que funcionalmente
permite, encubre y mantiene la adicción del otro, o se manifiesta como una
especie de adicción al otro y a su problema, generando un circulo vicioso, y
por ultimo es un intento normal de un cónyuge para adaptarse lo mejor posible a la vida compartida
con un adicto. Por ello la intervención profesional es primordial para poder
abordar la problemática de una forma integral y particular en cada caso.