Preguntas y respuestas solicitadas por
la revista EXTRA del diario EL DEBER
Las respuestas fueron utilizadas para
la redacción de notas periodísticas sobre temas de interés general para la
comunidad de lectores de la revista dominical EXTRA del diario El Deber de la
ciudad de Santa Cruz de la Sierra –
Bolivia
1.
Articulistas recomiendan gastar dinero en
experiencias en lugar de cosas materiales. Es decir, gastar por ejemplo en un
viaje que en un par de zapatos. ¿Usted cree que la felicidad se alcanza a
partir de un poder adquisitivo (dinero)?
Para algunos filósofos la felicidad se reduce a la ausencia
del dolor, pero algo tan simple como eso puede convertirse en algo muy
perturbador cuando la felicidad se confunde con el placer y el goce irrestricto
y aún más si se piensa que con el dinero se puede
adquirir y asegurar cualquier placer. Es un error frecuente confundir placer
con felicidad, y es una equivocación también creer que el dinero permitirá eliminar
toda carencia o vivencia de insatisfacción. Ni la experiencia comprada más sublime
o más divertida son capaces de proveer felicidad por sí mismas, la felicidad es
en su lugar una permanente búsqueda de equilibrio personal así como una tarea
para evitar el dolor. La felicidad es una construcción emocional ligada al
desarrollo espiritual y a la capacidad de establecer relaciones interpersonales
armoniosas. El dinero será bien venido y utilizado cuando se administre
sabiamente para obtener alimentación, seguridad, salud y educación, todo lo demás es suntuario y muchas veces
genera frágiles espejismos de felicidad. La carrera del consumismo imprudente
generado por la cultura del lujo, puede
generar estados de malestar profundo cuando no se pueden adquirir ciertos
objetos del falso deseo o de la urgencia por presumir su posesión. Dinero no es
equivalente a felicidad ni felicidad equivalente a placer.
2.
¿Qué es lo que da el dinero? ¿Seguridad? ¿Poder?
El dinero puede dar seguridad cuando se habla de poseer un
espacio donde protegerse y donde reposar luego de las jornadas diarias de
trabajo o actividad. Pero si se habla de obtener seguridad o autoestima en la
medida del dinero poseído, estaremos en el camino equivocado, la fortaleza
personal se logra luego de un proceso de maduración y de templanza frente a los
desafíos y las dificultades de la vida. La seguridad personal es un producto
psicológico fruto de las experiencias y de la adecuada regulación de las
emociones, así como de los logros y de los afectos constituidos en el entorno
familiar y social. Cuando el dinero es usado para el ejercicio del poder sobre
otra persona o sobre grupos humanos se convierte en una herramienta perversa
puesta al servicio de la dominación y de la creación de relaciones de
dependencia donde el que posee es el amo y el otro es el esclavo.
3.
¿Hay otras cosas que pueden llenar nuestra vida
en lugar del dinero?
La
respuesta parece obvia, el amor, la paz, la armonía entre los miembros de una
familia; el disfrute de las cosas sencillas de la vida, la capacidad de
admiración frente a la naturaleza, la posibilidad de sentirse creativo y útil
para otros, la sabiduría de disfrutar de lo que se tiene y de no ambicionar lo
que otros poseen permitirá lograr un equilibrio entre la necesidad y utilidad
del dinero de tal forma que no se instale una sobrevaloración del tener sobre
el ser.
4.
¿Cuán importante es ser buen administrador de su
dinero?
Para
una persona, para una familia, para una empresa o un estado; el principio de
una buena administración consiste en utilizar los recursos de tal forma que se
aporte al buen común en cualquiera de sus instancias. La administración
inteligente apunta a disponer de lo necesario para llevar adelante un nivel de
vida digno sin ostentaciones, así como disponer una fracción para la previsión,
para el ahorro e incluso para la vejez. En la familia la administración
responsable, solidaria y conjunta del
dinero disponible evitará conflictos y
desconfianzas, a la vez que impedirá la instalación del egoísmo y del cálculo,
ambos enemigos de calidad de vida en la pareja.